Señor, concédeme el discernimiento para enteder la forma en que me hablas y aquello que quieres transmitirme. Sé que pondrás en mi camino tareas para entregarme un mensaje; ayúdame a entenderlo correctamente.
Contra ti, contra ti solo he pecado, Y he hecho lo malo delante de tus ojos; Para que seas reconocido justo en tu palabra, Y tenido por puro en tu juicio. (Salmos 51:4)
Sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones. (1 Tesalonicenses 2:4)
Sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones. (1 Tesalonicenses 2:4)
Señor, que solo pensamientos que bendigan permanezcan en mi, y que Tu bondad y Tu justicia reinen en mi corazón, de forma que aquellos que se acerquen a mí, sientan Tu presencia.
"Se feliz, porque la piedra nunca es tan grande si confías en Dios, porque las injusticias acaban pagándose, porque el dolor se supera, porque el coraje te levanta, porque el miedo te fortalece, porque los errores te hacen aprender y porque nadie es perfecto. DIOS hoy, camina contigo. Feliz Día."
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