Una Palabra:
LUZ
Un Versículo:
Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. (1 Juan 1:5)
¿Te imaginas caminar por un lugar en el que no puedes ver nada delante de ti? Hoy en día, incluso cuando no hay luz en casa, disponemos de otros recursos de iluminación, pero hace unos años no era así. Cuando no teníamos luz, nos sentíamos limitados, perdidos sin encontrar lo que buscábamos. Esa oscuridad nos causaba incomodidad e incluso cierto temor. Así puede suceder, ahora, en nuestro andar por la vida, cuando nos alejamos de la veradera fuente de luz, Nuestro Padre Celestial.
Dios es la luz del mundo y los que le siguen caminarán en su claridad. Con Él, seremos capaces de ver lo que otras personas no ven y esto marcará toda la diferencia en cada paso que demos.
Ahora somos capaces de comprender el mundo espiritual y actuar según su lógica. Ya no tenemos que dejarnos dominar por pensamientos y sentimientos que intentan socavar nuestra fe y nuestra alegría, porque la luz del Señor ha entrado en nuestras vidas para mostrarnos quiénes somos y lo que podemos hacer en Él.
Utilizar el objetivo adecuado
Si todo se aclara en aquello que emprendemos desde lo profesional, nuestras relaciones, nuestra salud, nuestras finanzas y todo lo que nos rodea, nos será mucho más fácil tomar mejores decisiones y obtener los resultados que trabajen para el propósito que El Señor ha diseñado para cada uno de nosotros.
Por lo tanto, no mires las situaciones que no han caído bajo el brillo de esta luz, porque dejarla de lado es un desperdicio que puede generarte un gran daño. Permanece en la luz de paz y misericordia infinitas, de amor y cuidado que solo hallaremos en Dios todopoderoso, pues es esta, la única luz que nos hará crecer, en medio de la adversidad.
Oración:
Señor, gracias por ser la luz que alumbra cada uno de los pasos que doy hacia los grandes propósitos que has planeado para mí. Por favor continua iluminando mi vida y mostrándome qué camino debo seguir, pues sólo iluminado por el brillo único de Tu amor y Tu misericordia, podré alcanzar la victoria que esperas de mí. En el Nombre de Jesús, Amén.
