Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré. Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma que le busca. Bueno es esperar en silencio la salvación de Jehová. Lamentaciones 3:24-26
Muchos tenemos dificultades cuando se trata de disciplinarnos en el área de la gratificación instantánea. Hay tanto que queremos ahora mismo. Y para empeorar las cosas, por lo general tenemos la capacidad de seguir adelante con nuestros deseos. De eso se trata la industria de las tarjetas de crédito: téngalo ahora, y pague después. Pero las finanzas no son el único aspecto donde nos metemos en problemas. Tener prisa por casarse puede llevar a una elección imprudente de cónyuge. O tener prisa por tener éxito puede tentarnos a no considerar si nuestra búsqueda se alinea con los planes de Dios.
¿Por qué el Señor quiere que esperemos? Para protegernos de nuestros propios caminos autodestructivos. Quienes no pueden decir no a sus propios deseos terminan esclavizados a ellos. Dios quiere que tengamos la disciplina para esperar que Él provea en su tiempo perfecto. Ya que el Padre celestial es omnisciente, sabe qué es mejor para nosotros. Usted puede confiar en que si Él le pide que espere, es porque tiene algo mejor en mente.
¿Hay algo que parece tener poder sobre usted? Si es así, puede ser un área que requiera disciplina. Someta sus deseos al Señor y entrégueselos. Luego, comience a decir no a las tentaciones mientras espera que Dios le revele su plan perfecto.
Confíe en que el Señor le dará lo mejor de Él en el momento adecuado.
Dios le bendiga.
