Devocional:
¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. (Mateo 10:29)
Tu Salvador está trabajando en ello. Puede parecer que Él está ausente de tu situación en este momento, pero no es así. Como hijo del Dios vivo, tu Padre siempre está interesado en ayudarte a superar cualquier cosa que te esté derrotando, desanimando o deprimiendo. Quiere que hables con Él de las cosas que te preocupan. Y desea que busques Su consejo y guía, por pequeño que te parezca el asunto.
Por supuesto, desde una perspectiva teológica, puedes saber que Dios se preocupa por ti. Pero, a veces, tus dificultades pueden hacerte sentir insignificante, inadecuado e indigno, hasta el punto de que empiezas a sentir que estás por debajo de la atención del Señor. Al fin y al cabo, Él tiene que ocuparse de todo el mundo; ¿por qué iba a dedicar tiempo a los problemas que te angustian? Y la verdad es que ya has acudido tantas veces a Él con tus problemas que te preguntas si está cansado de escucharte.
Sin embargo, Jesús dijo: “Pues aun vuestros cabellos están todos contados.” (Mateo 10:29). Eso significa que el Padre se preocupa por cada detalle de tu vida, y quiere que experimentes una profunda comunión con Él acerca de todo lo que te preocupa. Nunca se cansa de escuchar tu corazón, y no te ha abandonado. El hecho de que no percibas Su actividad en un momento concreto no significa nada. Así que, cuando te esfuerces por caminar sabiamente con Dios, nunca digas: “A Dios no le importa eso”. A Él sí le importa. Si te concierne a ti, le importa a Él. Tu Salvador lo está resolviendo. Por eso, como instruye el Salmo 62:8: “Esperad en él en todo tiempo, oh pueblos; Derramad delante de él vuestro corazón; Dios es nuestro refugio.”
Padre, gracias por preocuparte de todo lo que me preocupa. No siempre percibo Tu obra en mi vida, pero Te alabo de todos modos, confiando en que todas las cosas que encuentro en mi camino, son para mi bien y para Tu gloria. En El Nombre de Jesús, Amén.