Mas yo esperaré siempre, y te alabaré más y más. Salmo 71:14
Sigue soñando. Confía en Dios para tu futuro y busca Sus propósitos para tu vida. Una persona sin motivación o sin esperanza difícilmente podrá disfrutar verdaderamente la vida. Quizás pienses: “A esta altura, no veo nada por lo cual soñar.” Pero recuerda: mientras haya vida, hay potencial en ti. Los tropiezos y las limitaciones pueden ser desalentadores, pero Dios aún tiene planes para ti y desea que mantengas viva la esperanza.
A veces todo depende de una cuestión de actitud. Necesitas tener algo por lo cual esperar y trabajar. No te compares con los demás ni te lamentes por el pasado o por lo que crees que no puedes hacer. En lugar de eso, considera lo que sí puedes hacer. Eres un hijo de Dios, lleno del Espíritu Santo. La sabiduría y el poder del Señor están a tu disposición. No vivas enfocado en tus debilidades; enfócate en lo que Dios puede hacer a través de ti.
Deja que el Señor trace tu futuro. Permítele obrar en tu vida de la manera que Él desee. No subestimes ni Su poder ni lo que Él puede lograr en ti. Puedes hacer cualquier cosa que Dios te llame a hacer. Así que sigue soñando y esperando grandes cosas de Aquel que nunca falla.
Reflexión:
Dios no ha terminado contigo. Si hoy te sientes sin dirección o sin metas, pídele al Señor que renueve tus sueños y te dé una visión fresca de lo que quiere hacer en tu vida.
Señor, gracias porque aún tienes propósitos para mí. Ayúdame a mantener viva la esperanza y a soñar en Ti. Enséñame a confiar en Tu poder y a seguir adelante con fe, esperando que obres grandes cosas en mi vida. En El Nombre de Jesús, Amén.