Devocional:
Toda palabra de Dios es limpia; Él es escudo a los que en él esperan. (Proverbios 30:5)
Todos tenemos días en que nos levantamos necesitando un consejo o una palabra de orientación. En esos momentos, te planteas a quién acudir: a tus amigos, a alguna figura de autoridad o incluso a Internet. Pero se te ocurre que esas fuentes no siempre son correctas y a veces no tienen la perspicacia o el conocimiento que necesitas, para encontrar alternativas a tu situación.
Pero hay Alguien a quien puedes recurrir que siempre tiene el consejo que necesitas, independientemente de a qué te enfrentes. Ése, por supuesto, es el Dios vivo, cuya sabiduría va más allá del entendimiento y cuya Palabra ha demostrado ser verdadera a lo largo de los siglos. De hecho, innumerables creyentes a lo largo de la historia han testificado: “Clamaron a ti, y fueron librados; Confiaron en ti, y no fueron avergonzados.” (Salmo 22:5). Como ellos, tú nunca te equivocarás de camino cuando busques la sabiduría de Dios para tu vida y le obedezcas. Ciertamente, el Señor te guiará con profunda sapiencia y amor incondicional, y te conducirá por sendas de rectitud.
Por eso David escribió: “Bendeciré a Jehová que me aconseja; Aun en las noches me enseña mi conciencia. A Jehová he puesto siempre delante de mí; Porque está a mi diestra, no seré conmovido” (Salmo 16:7-8). David vio de primera mano que el Padre es digno de confianza para guiarnos por el camino que debemos seguir.
El deseo del Señor es que confíes en Su guía en cada momento de la vida, ya se trate de decisiones grandes o pequeñas. Así que, independientemente del consejo que necesites hoy, pídele que te muestre lo que debes hacer, que pasos debes emprender, y que bendiga a su vez, las relaciones con otros que debas entablar en dicho camino. Abre la Biblia, inclínate ante Él en oración, y de todo corazón, y escucha cómo se te revela. Porque no hay nada más sabio ni más seguro que confiar en Su Palabra. Ciertamente, Tu Padre de los cielos jamás te decepcionará.
Oración
Padre, Tú conoces las preguntas que hay hoy en mi corazón. Gracias por Tu Palabra. Guíame por el camino que debo seguir. En El Nombre de Jesús, Amén.