Devocional:
El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, Y los defiende. (Salmos 34:7)
Timothy Keller, pastor cristiano y escritor norteamericano, dijo en su libro “Falsos dioses”: “Si buscamos en alguna criatura el sentido, la esperanza y la felicidad que sólo Dios mismo puede darnos, acabará por no dárnoslos, dejando nuestro corazón vacío y destrozado”.
De hecho, todo lo que más deseamos en la vida sólo puede alcanzarse de verdad cuando lo buscamos en Jesucristo. A menudo nos sentimos frustrados porque ponemos nuestra razón de vivir en las personas o en las cosas, nuestras expectativas se fundan, entonces, en elementos imperfectos, asi como nosotros, somos también imperfectos. Sin embargo, al contrario de ese pensamiento, la Palabra de Dios nos muestra que el sentido de la vida, la verdadera alegría y la sensación de realización personal sólo pueden satisfacerse en Dios, que nos hizo para Su propósito y conoce nuestros corazones. Pon tu confianza en Él, ¡Tu Padre de los cielos, verdaderamente puede hacer de ti una persona plena y feliz!
Aplicando La Palabra
Para encontrar la verdadera satisfacción, sólo hallada en El Señor:
》¡Busca a Dios en primer lugar! Buscar la plenitud en lugares equivocados hará que te decepciones.
》Ora y entrega a Dios tus sueños y objetivos en la vida. Él te dará lo que sea mejor para ti, según Su voluntad.
》Confía en Dios de todo corazón. Él puede restaurarte y renovar tu esperanza.
》Encuentra en la Biblia la clave para obtener las respuestas que buscas. La Palabra de Dios es una fuente de luz y alimento para tu alma.
》Con Jesús, El Señor te da concece todas las bendiciones, que realmente necesitas. Caminando sin Él, nunca te sentirás completo ni feliz.
Oración:
Señor Dios, gracias, porque sólo en ti puedo encontrar la alegría plena. Tantas veces me he sentido decepcionado y frustrado por confiar en las personas, en las cosas o en mí mismo. Perdóname por buscar la felicidad en criaturas limitadas e imperfectas, como somos los seres humanos, y no en Ti. Las cosas efímeras de esta vida no pueden satisfacer los deseos de mi corazón. ¡Pero Tú Padre, sin dudas que puedes, pues eres perfecto e infalible! Transfórmame y lléname de alegría pura y verdadera, Te lo pido, En el nombre de Jesús. Amén.
