Devocional:
Porque los ojos de Jehová contemplan toda la tierra, para mostrar su poder a favor de los que tienen corazón perfecto para con él. (2 Crónicas 16:9)
¿Qué tipo de personas quiere utilizar Dios? Encontramos el mismo patrón a lo largo de la Escritura: las personas que Dios utilizó fueron fieles en lo que les había propuesto. Las personas que El Señor utilizó para grandes cosas fueron las que mostraron obediencia y compromiso en las pequeñas tareas que les habian sido encomendadas. Quizá hayas considerado alguna vez la posibilidad de dedicar tu vida al servicio cristiano, tal vez incluso en otro país. Ésa es una aspiración noble y buena, pero ¿qué tal servir al Señor en lo que estás haciendo ahora? ¿Qué te parece aprovechar las oportunidades que tienes hoy a tu alrededor?
Cuando Dios utilizó a David para derrotar a Goliat, estaba en una misión para su padre, llevando comida a sus hermanos en el frente de batalla. Pero como fue fiel en lo poco, Dios le dio más. Cuando Dios llamó a Gedeón para dirigir a Israel, estaba trillando trigo. Cuando Elías llamó a Eliseo al servicio del Señor, estaba arando un campo. Cuando Jesús llamó a Pedro y a Juan para que se convirtieran en pescadores de hombres, estaban remendando sus redes. Ninguno de ellos estaba sentado pensando – “¿Dios no hará nunca nada en mi vida?” No. Tenían las manos ocupadas, y trabajando.
Mientras buscamos oportunidades lejanas, podemos perdernos lo que tenemos delante de los ojos. ¿Estás ahora mismo sirviendo al Señor en aquello para lo que te ha llamado? Sé fiel en ello. Hazlo bien. Hazlo por el Señor. Puede parecer que tus esfuerzos pasan desapercibidos, pero alguien los ve. Y ese alguien te recompensará abundantemente en el momento correcto.
Oración
Señor, permíteme aprovechar las oportunidades que has puesto en mi mano hoy. Que desde el lugar donde me encuentro, desempeñe cada actividad, por pequeña y simple que sea, con amor para Tu honra y Tu gloria, sabiendo que ves mi esfuerzo y que en Tu tiempo perfecto me recompensarás con las bendiciones que me guardes en Tu bondadosa voluntad. En El Nombre de Jesús, Amén.
