“Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre” (Lucas 21:36)
Señor, Tu que eres Dios de paz y no de confusión ayúdame a sobrellevar todo lo que hago y lo que falta por hacer. Enséñame el camino para reconocer lo que puedo dejar para mañana y lo que no puede esperar. Confío en Ti para encontrar en mi vida, el balance que me lleve a la paz que solo Tú brindas. Amén.