Una oración sobre el desánimo
Y dijo: Oíd, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat. Jehová os dice así: No temáis ni os amedrentéis delante de esta multitud tan grande, porque no es vuestra la guerra, sino de Dios. (2 Crónicas 20:15)
Señor, es tan fácil enfocarme en mis problemas y olvidar que estás cerca y dispuesto a ayudarme. No permitas que mis sentimientos de desánimo hagan temblar mi confianza en tu amor por mí. El desánimo me hace dudar de tu amor, alejándome de mi mayor fuente de esperanza. Ayúdame a darme cuenta de que tú lucharás por mí mientras yo confíe en ti.