Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré. Salmos 5:3
¿A quién acudes en busca de orientación? hoy en día podediferentes en busca de ayuda: la televisión, las revistas, los libros, los amigos e incluso nosotros mismoss. Aunque estas fuentes ofrecen algunos consejos útiles, Dios es la fuente de orientación más precisa y fiable. Su sabiduría está disponible a través de la oración y el estudio de Su Palabra. La búsqueda diaria del Señor puede mantenerte en el camino correcto.
El Salmo 5 es la oración de David pidiendo orientación. Es uno de los salmos consecutivos escritos por él para ser interpretados bajo la dirección del «músico principal» o «director del coro» (Salmos 4; 5; y 6). Cada uno de los tres salmos comienza con un verbo imperativo que demuestra confianza al acercarse a Dios en oración o en alabanza. Tanto si se interpreta en público como si se ora en privado, este salmo expresa confianza en Dios y compromiso con su voluntad.
La primera estrofa de este canto busca la atención de Dios hacia las palabras y el corazón del solista (Sal. 5:1). El rey David clama al Rey de reyes y Señor de señores para que le guíe (v. 2). A pesar de su poder y su posición, David necesita el sabio consejo del único Dios verdadero. Comienza el día en oración, hablando directamente con Dios. «Por la mañana» se menciona dos veces en el versículo 3, subrayando la importancia de la guía diaria y la esperanza renovada.
No soy una persona madrugadora, por lo que siempre me ha costado programar mi tiempo de silencio a primera hora de la mañana. De hecho, confieso que leí varias traducciones de la Biblia antes de encontrar una que usara «seriamente» o «ansiosamente» en lugar de «temprano» en el Salmo 63:1: «Seriamente te busco» (NASB y ESV). Entiendo la necesidad de empezar cada día en oración para que Dios me guíe.
La mañana trae consigo novedad y esperanza. Al amanecer, cada persona tiene la oportunidad de empezar de nuevo. Comienza la promesa de un nuevo día, y sólo Dios sabe cómo se desarrollarán los minutos y segundos que aqui transcurrimos. David conocía su necesidad de buscar al Señor cada mañana, aunque a veces se tomaba la justicia por su mano y se adelantaba a los designios del Padre. En el Salmo 5, el rey David renueva su compromiso de acudir al Todopoderoso en busca de guía cada día. Todos los cristianos deberíamos hacer lo mismo: abrir nuestros ojos y cómo primer impulso agradecer y alabar al Padre de todo lo creado, por su inmenso amor y su misericordia.
Señor, que no decaiga mi alabanza y mi servicio a Ti, siempre bajo la guía de Tu revelación en las Santas Escrituras. Que sea mi prioridad clamarte, adorarte y rendirte gloria en todo momento y en todo lo que haga. Guíame a no fallarte Padre, Te lo pido, En El Nombre de Jesús, Amén.
